LOS NIÑOS PUEDEN HABLAR INGLÉS EN DOS AÑOS.

Cuatro décadas de profesor y 32 años en el IES Torres Quevedo reinventando la manera de enseñar un segundo idioma. El libro '¡La enseñanza, un mundo apasionante!'es la guía.

Artículo de Alejandro López Coto periodista del Diario Alerta:

Durante este tiempo, Palencia se encontró con una serie de problemas a la hora de impartir sus clases. "Yo, como seguramente le ocurre a todo el profesorado, comencé a enseñar como una asignatura más. Si no hacían caso los alumnos, les suspendía y me sentía satisfecho porque algunos lo estudiaban más y yo les aprobaba, pero no aprendían el idioma. Pronto, me di cuenta que su adquisición tenía poco que ver con las demás asignaturas". "Fue entonces cuando recordé mis años de estudiante, cuando era yo el que causaba algún problema al profesor, y empecé a ponerme en la situación del alumno". A partir de ahí, empezó el proceso que el mismo Alfonso define como: "De alumno problemático a profesor diferente".

La experiencia de los años y la paciencia le dieron a "El Míster", como cariñósamente le llamaban sus alumnos, la fórmula y encontró un sistema para que los estudiantes en edad escolar aprendieran un idioma de manera rápida y divertida.

El sistema se fue perfeccionando con los años y desde el pasado 17 de septiembre las librerías de Cantabria tienen un libro, '¡La enseñanza, un mundo apasionanate!'

Este proyecto plenamente Cántabro procede de veinte años de experiencia en el IES Torres Quevedo de Santander. Hay numerosas aportaciones valiosas del alumnado que enriquecen el libro capaz de crear estudiantes plenamente bilingües.

Alfonso demuestra hasta el detalle la manera de llevar la clase para que los alumnos vivan el idioma extranjero, como si fueran nativos del mismo. "No merece la pena aprenderlo de otra manera", comenta.

Nos admiramos cuando vemos a niños de otros países que a los seis meses hablan español. "La adquisición del idioma extranjero es más un arte que un aprendizaje", asegura Palencia. "Es muy diferente del de las demás asignaturas. Más que estudiarlo hay que vivirlo", afirma.

Según el sistema propuesto en el libro, Alfonso asegura que todos los niños cántabros entenderían y hablarían inglés en dos años. "Este proyecto es válido para cualquier idioma", asegura. En sus últimos años, no se sabe quien disfrutaba más en sus clases, él o los alumnos.

Volviendo al pasado, unos años antes, para ser exactos en 1983, Alfonso Palencia compró un completo equipo de vídeo para usarlo en clase. Mientras los demás se enzarzaban en discusiones sobre Reforma sí o no, él se dedicó a lo que tenía que ser fundamental en uno u otro modelo: el uso de las Nuevas Tecnologías. "Grabábamos episodios, concursos en inglés y no se oía más que barullo. Puse 400 cartones de huevos en el techo y paredes. Allí se podía dar clase, dice.

Hablar con Alfonso es volver al colegio, sentarse de nuevo ante ese profesor que te deslumbra con sus explicaciones, que vivía la enseñanza y lo transmitía. "El profesor debe sorprender al alumno desde el primer momento. Realizar acciones simples: Dar un pequeño portazo. Decir cómo se dice en el idioma extranjero. Escribirlo en la pizarra. Dejar caer una cartera y decir: he perdido la cartera. Sacar un trozo de lija y decir: esto es áspero. Por la otra parte, esto es liso. Hay que repetir estas acciones unas cinco veces en cinco días distintos y todos los alumnos, no solamente lo entienden, sino que lo hablan", afirma.

"Sin darse cuenta, como por arte de magia, a los dos años entienden y hablan el idioma. En los últimos años, en elbachillerato, se puede profundizar más en cómo funciona el idioma con unos alumnos que ya lo entienden y lo hablan, que no tendrán que mirar en todas las direcciones, como vemos a muchos de nuestros políticos en las reuniones internacionales" asegura Alfonso.

Lo que está claro es que si el sistema funciona, y parece que funciona por la lluvia de buenas críticas que ha despertado en quienes lo han leído, Cantabria podría ser pionera en la introducción de este modelo en las aulas.

El propio gabinete del Ministro de Educación ha recibido un ejemplar y le han contestado que "estudiarán muy atentamente" la metodología que propone Palencia.

Una de sus hijas, al saber que se iba a publicar este libro, le decía jocosamente en un email: "Está muy bien. Me paarece muy interesante. El problema va a ser que como apliquen tu sistema de enseñanza ya no voy a destacar por saber hablar inglés ya que lo hablará mucha gente en este país"